El misterioso ayudante

Una noche muy oscura (como todas en los campos llanos sin urbanizar en los pueblos pequeñitos), mientras el leve sonido del motor del coche me impedía dormir en el asiento de copiloto, mi novio me soltaba una leve sonrisa desde el asiento del conductor mientras intentaba sintonizar alguna cadena con mas marcha que esas de música clásica o las que dialogaban sobre política.

Durante el viaje desde mi pequeño pueblo hacia la gran ciudad de Gdansk que está a unos 400km no conseguimos captar ninguna emisora, cierto es que por aquí hay pocos repetidores de radio y no era de extrañar que solo encontraríamos las radios locales y poco más.

-Clac!!- de un golpe Adam cerró la tapa transparente del casete:

-Vaya porquería de radio no hay más que morralla-

Este último golpetazo era ya la gota que colmaba el vaso, ahora sí que no podría dormir y la culpa era suya, así que se lo recriminé y comenzamos a discutir.

Cuando en plena discusión de repente de la nada apareció una curva ya bien entrado el bosque mágicamente aparecido ante nosotros.

Él demasiado absorto en la discusión no vio la curva y de repente todo se veía negro negro negro ¡plamplam! ¡tolong! ¡tolong! repicaban las ramas de los árboles en el fiesta azul chocaban contra los cristales krrrrrrrrrrrrrrrrrrrss y al instante rodamos, recibí golpes en todas las partes de mi cuerpo no se salvó ni una... y seguíamos rodando y rodando, parece mentira que en las llanuras europeas haya una pendiente tan inclinada como para rodar, pero la había.

En una de las vueltas no se cuál de todas las que dimos una rama que entro por el cristal me dejó inconsciente.

Me desperté al rato tenía un mareo increíble en el cuerpo y no sabía muy bien cuánto tiempo había pasado me dolía mucho la cabeza y el estómago, salí por la ventanilla rota del coche arrastrándome por el suelo, un gran fallo al salir tenía que haber retirado primero los cristales pero qué cabeza la mía solo quería salir del puñetero coche.

Lo conseguí, jadeando me eche sobre el suave lecho de helechos.

No recordaba cómo había pasado ni tenía la más remota idea de dónde estaba, sólo sabía que Adam había desaparecido dejando tras de si la otra ventanilla igualada a la mía.

Decidí aunque aún enfadada por lo que había pasado ir a buscarle (seguro al verme inconsciente no quiso tocarme y salió a pedir ayuda) aunque ese pensamiento me pareció más para cubrir mi oscura mente que se temía lo peor.

Como ya había dicho era de noche muy oscura por cierto, estaba en un bosque más oscuro aún. La luna no brillaba señal de que había nubes lo cual me complicaría mucho la búsqueda, gracias a mi maravillosa inteligencia por llevar en el coche linternas (muy pequeñitas pero al fin y al cabo lucían), un par de mantas, el botiquín y el móvil me metía a gatas por dentro del volcado coche en busca de mi teléfono y el resto de las cosas; mi bolso estaba atrapado entre los amasijos de lo que antes era mi asiento y era imposible sacarlo pero conseguí rescatar el móvil le di mil besos hasta que me di cuenta de que se le había estallado la pantalla y ya no funcionaba.

Exclamé furiosa un gruñido, y me lancé a dondequiera que estuviera Adam.

Caminaba despacio a parte de por los morados y la falda, porque cada dos por tres me tropezaba con alguna sinuosa rama situada estratégicamente en el suelo de tal forma que fuera imposible esquvarla.

El oscuro bosque se empezaba a abrir en un claro (que por la ausencia de luna aunque más despejado seguía estando muy muy oscuro); me adentré despacio y de repente entre las tinieblas escuche un ruido, mas bien parecía un gemido no, se diferenciaba muy bien.

El corazón me empezó a latir a un ritmo desenfrenado parte por el pánico y parte por la esperanza de que el torpe de mi novio (aunque fuera culpa suya deseaba verle y saber que está bien); pero ese gruñido no, no era Adam más me valía alejarme rápido de ahí, por lo menos en el bosque será más fácil esconderse evitándo ser la presa de algún oso o lobo o lo que hubiese allí.

Confusa y atemorizada no supe qué hacer, decidí volver a tientas sin hacer mucho ruido al coche, pero el gemido ya se oía muy cerca ahora lo diferenciaba mejor era, como como una radio de esas de walkie, me quedé quieta, y una voz desde la oscuridad dijo

-Disculpe señorita ¿se ha perdido?-

Era la voz de un hombre joven no le vi la cara pero estaba allí qué alegría había alguien en este bosque que a lo mejor me podría ayudar.

-Sí si me he perdido más bien hemos tenido un accidente de tráfico nos hemos salido de la carretera y ahora solo estoy yo no encuentro a Adam... y...

-Tranquilícese señorita soy un guarda del bosque ¿ve? mi placa.

La verdad es que necesitaba calmarme, estaba histérica aora me daba cuenta de qué es lo que había pasado, puede hasta que estuviera en shock.

-Sí si la veo (era imposible no verla me la había puesto delante de la cara iluminandola con una lintenita sacada no se de dónde)

-Dice que su ... ¿pareja?¿ ha desaparecido?

-Si debemos encontrarle.(me dije a mi misma aparentemente más tranquila.)

Aquel chico a parte de que estaba oscuro también cojeaba un poco yo no quise preguntarle bastante tenía con lo mío.
Pero al final la curiosidad me puto y le pregunté:
-¿Perdona, te has hecho daño o algo? es que cojeas mucho..
Él con una sonrisa respondió
- no, tranquila yo también tuve un accidente aquí hace años y bueno me quedo éste recuerdo...hablando de accidentes por aquí cerca hay un coche abandonado así que podríamos usar su batería para resucitar la radio... veras hace un tiempo no va bien y temo que se ha vuelto a descargar y no podremos buscar a tu chico sin los walkies.
-Vale me parece bien! todo por no quedarme sola allí
llegamos a un coche, era grande probablemente un jeep o cualquier otro todo-terreno... no se diferenciaba bien porque había unas plantas enredaderas alrededor y arbustos bastante altos por lo que una persona que nunca ha sabido que está allí no se fijaría en su presencia.
Me quedé fuera de la zona llena de plantas el chico (más ágil que yo) entró de lleno y en seguida salió agitando el walkie
-definitivamente se ha roto...creo que fue por el golpe que le dí...
Seguimos horas buscando y cuanto más buscábamos más nos adentrábamos en el bosque...
Aquella noche se estaba alargando mucho... pensé yo, pero evidentemente sin ningún medio para ver la hora era imposible saber que hora era...
me sentía cansada me dolía el vientre,tenía las piernas llenas de arañazos y este chico extrañamente, no tenía ningún rasgo de cansancio... de repente un ruido bastante agudo me hizo reaccionar...
Adaaaam!!!! no contestaba... como el resto de la noche Adaaaaaaaaaaaaaaam!!!
me di la vuelta y vi otra vez al guardabosques... me miró y me tapó la boca
-shhhhhhhhhhhhh... no hagas ruido- susurró.
-ok...
se oyó otro ruido...
-ya está ya pasaron...
-¿quiénes?- pregunté
-Los que nos buscan..
Mis sospechas fueron a más decidí enfrentarme a mis dudas:
-¿Por cierto que hace un guardabosques en medio de la noche ayudándome a encontrar a mi novio a 40 km de algún pueblo y sin coche?¿Cómo te llamas?¿qué hacemos aquí? me estaba poniendo nerviosa necesitaba respuestas...
-Perdón te lo tenía que haber explicado...pero así tenía mas gracia
Yo me llamo Ivan tengo 23 años y hace algún tiempo acabé aquí en el bosque...
tuve un accidente con mi Land Rover mientras buscaba osos por la zona no vi una curva y bueno mi coche... ya lo has visto...
-¿Quieres decir?¿oye no me intentes meter miedo eh?que ese coche lleva allí por lo menos un par de años... y tu no tienes pinta de vivir en el bosque...
-Eso es lo que quería decirte Jessika..Ese accidente... la herida que me hice en la arteria femoral al salir despedido por la luna de delante hizo que me desangrase en segundos..(la luna de repente salio e iluminó su cara mortecina, pálida, morada...). ando vagando por éste bosque intentando que me encuentren desde hace tres años y cada noche es la misma noche para mí. Sólo busco ayuda...
Le miré y salí corriendo dios sabe donde...
corrí,corrí.... seguí corriendo... pero estaba tan oscuro... y había tantos árboles me enganché en uno y me caí al suelo al incorporarme Iván estaba delante mía...
-Por Adam no te preocupes... Se lo han llevado al hospital,intentó reanimarte aunque él estaba gravemente herido decidió ir a buscar ayuda y cuando ya encontró la carretera pasaba un coche que no le vio en la oscuridad... En éstos momentos está en el quirófano y no se acuerda de nada...
Solo de tu nombre... Pero él no recuerda dónde estás y te quedarás aquí para siempre conmigo
-Pero... tu has dicho que nos buscaban les hemos oído joder!
-Pero sólo Adam sabía dónde has muerto...en sus brazos en la cuneta
Intenté levantarme pero no podía...-No estoy viva déjame en paz! estoy aquí en el bosque encontraré ayuda... Iván me dio la mano
-levanta...
me alcé y cuando me di la vuelta y vi que señalaba algo...
-mira allí
Me acerque con cuidado de no volver a caerme y entre las ramas a unos metros de mi coche, en la cuneta entre los cristales que cayeron de la ventanilla y un manto de helechos Un mechón rubio asomaba de entre los matojos.. me acerque para verlo mejor y vi el resto horrorizada...
La imagen de mi cuerpo empapado en sangre con una rama clavada en mi vientre con la vista clavada en el cielo..
-No... no es cierto dime que no lo es! DÍMELO!!!
-Sí,sí lo es...ahora vagarás conmigo buscando a tu novio igual que yo busco ayuda... y todas las noches serán siempre la misma noche.

-Clac! me despertó el sonido de un casset cerrándose.

-Vaya porquería de radio no hay más que morralla- dijo Adam con un tono cansado
Miré al frente y allí estaba,en la Carretera había un hombre justo en el centro...Iván...
-Noo!
Y todo se volvió negro otra vez...


Y ahora que tú sabes mi historia me ayudarás a encontrar a Adam.
Noche tras noche será la misma noche...